Impacto

 

República Dominicana

El presidente del Consejo Unificado de las Empresas Distribuidoras de Electricidad (CUED), Celso Marranzini, anunció este jueves la suspensión de los apagones programados, conocidos también como control de abastecimiento, con el objetivo de evitar afectar a los clientes que cumplen con sus pagos.

“Lo hemos suspendido”, declaró Marranzini, aclarando que la medida no se ha descartado por completo. “Estamos implementando otras acciones que creemos pueden ser más efectivas”, explicó.

Marranzini detalló que el sistema de control de abastecimiento, puesto en marcha en 2004, genera un problema en el sector eléctrico, ya que castiga a los clientes cumplidores al tomar medidas que afectan tanto a quienes pagan como a quienes no lo hacen. En este sentido, subrayó que se ha optado por instalar equipos que permiten dividir los circuitos y realizar un mejor balance de carga.

El control de abastecimiento se mantuvo durante cinco semanas, un período que Marranzini consideró corto, con efectos limitados, ya que solo se aplicaba de lunes a viernes. A pesar de ello, expresó que la medida tuvo un impacto mínimo.

Estos apagones se aplicaban en zonas donde las pérdidas de electricidad superaban el 50% debido al robo de energía, con cortes de tres horas o más.

La inestabilidad administrativa y la falta de inversión han sido dos de los problemas más persistentes que han afectado al sector eléctrico. Marranzini destacó que el constante cambio de gerentes generales en las Empresas Distribuidoras de Electricidad (Edesur, Edenorte, Edeeste) ha obstaculizado el avance de los proyectos en el sector. “Cada cambio de gerentes es un cambio de política”, señaló.

Por ejemplo, la Empresa Distribuidora de Electricidad del Este ha tenido al menos cinco gerentes en los últimos cuatro años. Además, el CUED, presidido por Marranzini desde 2024, ha tenido cuatro presidentes. “Ningún negocio crece sin continuidad”, comentó.

En contraste, destacó el caso del Consorcio Energético Punta Cana (CEPM), una empresa privada que opera en la región Este del país, la cual ha mantenido los mismos gerentes por más de 20 años. Marranzini destacó que esta estabilidad ha permitido un mejor desempeño en su gestión.

El presidente del CUED explicó que una de las razones por las cuales no se ha podido invertir lo necesario en el sector eléctrico es la baja tarifa con la que el gobierno vende la energía. Mientras que el CUED cobra en promedio 16 centavos de dólar por kilovatio-hora, CEPM cobra 37 centavos, lo que les permite realizar mayores inversiones.

En cuanto a los ingresos, el CUED reportó que las Empresas Distribuidoras de Electricidad recaudaron en 2023 y 2024 más de 2,040 millones de dólares anuales, lo que representa un incremento de más de 500 millones con respecto al promedio de 2018-2021, que fue de 1,532 millones.

Uno de los factores que ha impulsado este crecimiento es la implementación de tecnologías avanzadas para la medición y el control. En 2024, se instalaron 550,000 medidores de última generación, y para 2025 se espera la instalación de una cantidad similar, con el objetivo de alcanzar los dos millones de medidores remotos.

Estas innovaciones permiten optimizar el servicio mediante la telemedición, el telecorte y la reconexión sin necesidad de intervención presencial, lo que ha mejorado la eficiencia operativa.

Además, Marranzini destacó que se están llevando a cabo proyectos de modernización y electrificación de redes de distribución con una inversión de 650 millones de dólares, financiados por organismos multilaterales como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Banco Mundial, la Corporación Andina de Fomento (CAF) y el Fondo OPEP para el Desarrollo Internacional (OFID). Estos proyectos incluyen la construcción de subestaciones, la rehabilitación de redes y la instalación de 250,000 luminarias LED.

Fuente: Listín Diario

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